lunes, 2 de noviembre de 2009

alma

Llego con el alma húmeda , fácilmente se derramaría en lágrimas. La cabeza manda más en estos días y controlo el dolor, la casa está iluminada por esos últimos rayos de sol que me hacen sonreír, quizás ella se seque.

Ejercicios de racionalización, de poner la inteligencia en su sumo grado, para no sucumbir, ni sentirse víctima.

Situaciones cotidianas que han cambiado de color, mirar ese color como una observadora. Otro aprendizaje.

La lucha con uno mismo para continuar...sobre todo con alegría, me asusta la idea de entristecerme con cierta asediudad. Otro aprendizaje ¿Lo lograré?

Los días son más cortos, son las siete de la tarde y ya ha anochecido, es el otoño con todo lo que trae, hojas caídas, colores cálidos en los campos y en los cielos. Agradecimiento de este techo que me cubre , me envuelve y acurruca bajo este blues de Taj Mahal y un nuevo libro que me espera , quizás él tenga la respuesta

8 comentarios:

Felipe Medina dijo...

Quizás...quizás un libro pueda dar calidez a esa alma húmeda.

El mejor libro es nuestra mirada eternizada en ese interior que nos cubre y,al mismo tiempo,nos desmantela.

¡Cuesta tanto existir en plenitud!
¡Es tan difícil pasear nuestra existencia sin humedecernos!

Mira una alameda,observa una amanecida y entrega parte del aliento al viento que revolotea en tu cabello.

Enciende la chimenea y en el crepitar de la llama hazle un corte de mangas al silencio.


Bicos

brancalúa dijo...

Todo lo lograrás.
Porque eres tu lo único importante en esa selva de desconocidos.
No te dejarás entristecer porque hay tantas personas que necesitamos la sonrisa de tus ojos, te necesitamos tanto que no nos vas a dejar sin ella.
Pronto va a llegar al mundo un pequeño que necesitará tu verdad y tu sabiduria, esa que has logrado a base de lágrimas y sonrisas, esa verdad tan profunda que posees a base de gopes bajos...esa que nos dice que lo único importante eres tu y tu familia y tus amigos , los que son de verdad, los que siempre están a tu lado.
Todo lo lograrás.
A mi me duele tu dolor de hoy.
Siempre te quiero.

Ciberculturalia dijo...

Ahora acabo de entrar en tu precioso e íntimo espacio. Es tarde para llamar, para oír tu voz. Mientras es una hora adecuada, mientras llega mañana, levanta el ánimo. Felipe y Brancalúa te lo dicen con armonía, con palabras llenas de poesía. Yo a mi estilo, rotunda, enérgica: Deja de hacer bobadas mi querida Maca y arriba. Tienes mucho por lo que sonríer. Mucho por lo que luchar.
Tu amiga madrileña te lo pide.
Un abrazo muy fuerte

Juan Navarro dijo...

No, no está en el libro la respuesta, sino en tu corazón cálido y sabio. El libro es tu amigo; tu corazón, tu cómplice y tu consejero, tu maestro. Escucha atentamente, no habla en castellano ni en gallego, sino con emociones, las palabras de sus latidos.
Hoy es noche en que la luna empieza a llenarse. Aguarda su magia.
Un beso.

mariajesusparadela dijo...

Yo creo, como Juan, que la respuesta siempre está en una mismo. Pero a veces los libros nos dicen justo lo que necesitamos leer.
Cada espacio de nuestra vida es diferente. Cada etapa es distinta, pero NUNCA peor, porque en todas se aprende y se llega a ellas con la madurez de todo lo anteriormente vivido. Y eso nos hace grandes, mejores personas, más sabias, más comprensivas...

sara dijo...

Maca te encuentro muy triste en tus palabras, espero y confío que te animes, la vida hay que vivirla a tope.

Muchos besos.

Sara.

RGAlmazán dijo...

Espero que hoy, han pasado tres días, te encuentres más alegre. Espero que busques motivos para estar contenta, que también los hay. Apóyate en ellos y sube, sube hacia arriba, seguro que puedes. La respuesta está en tí misma.
Un beso.

Salud y República

agradasualeira dijo...

ÁNIMO NENITA, TENEMOS QUE HABLAR DE ESE TEMA ANDO PREOCUPADA